La Unidad Mixta de Investigación HIGHPPE tiene como objetivo desarrollar nuevas tecnologías para mejorar la fabricación de piezas de polipropileno expandido (EPP), un material que está experimentando un considerable crecimiento en el sector de automoción por su potencial como sustituto de metales y otros polímeros gracias a su excelente ligereza y alta resistencia.

Con una duración de cuatro años y un presupuesto total de 2.8 millones de euros, HIGHPPE contará con un equipo formado por 30 personas y dos oficinas, localizadas en AIMEN y en CETEC.

La campaña “Aporta tu kilo de solidaridad”, puesta en marcha por el Centro y en la que han participado el personal de la entidad, ha recaudado un total de 556 kilogramos de alimentos no perecederos.

AIMEN y CETEC han dado a conocer las líneas de investigación en las que trabaja la Unidad Mixta de Investigación NEWFOAM, cuyo principal objetivo es desarrollar nuevas tecnologías para la fabricación de productos espumados de poliuretano, orientadas a la industria de automoción pero con aplicabilidad a medio-largo plazo en otros sectores, como el aeronáutico, el naval, el ferroviario, el militar o la construcción.

La finalidad de la Unidad Mixta Innflexion es desarrollar soluciones automatizadas de producción flexibles y de bajo coste para la unión, ensamblaje y rectificado de estructuras navales.

Gracias a los desarrollos conjuntos en NEXT-BEARINGS, Wärtsilä Ibérica ha implementado la tecnología láser en su planta de O Porriño para la fabricación de nuevos componentes navales de alto valor añadido.

En el marco de la iniciativa 4.0, promovida y financiada por la Xunta de Galicia, a través de GAIN y el IGAPE, y coordinada por AIMEN, ACLUNAGA y CIS Galicia, se han organizado un total de 13 seminarios y 8 sesiones formativas con el fin de acercar y transferir tecnología avanzada al sector.

SHIPBUILDING 4.0 ha desarrollado diferentes demostradores tecnológicos centrados en aspectos clave para el futuro del sector naval, como la robotización de la soldadura, el aligeramiento de estructuras navales mediante la incorporación de materiales compuestos de base polimérica, la reparación y fabricación avanzada de componentes mediante tecnología láser, o las aplicaciones de la Realidad Virtual en procesos y productos construidos en astilleros gallegos.

El robot autónomo desarrollado en el marco del proyecto permitirá automatizar operaciones logísticas y de ensamblaje en colaboración con los operarios.

Los resultados de esta iniciativa, en la que participan empresas, universidades y centros de investigación de cinco países, se validarán en plantas de automoción y de la industria aeroespacial, concretamente para ensamblaje de vehículos en Renault y de satélites en Thales Alenia, respectivamente.

El seminario se ha enmarcado dentro de la iniciativa Joints 4.0, la Unidad Mixta de Investigación compuesta por AIMEN Centro Tecnológico y GKN Driveline Vigo, que busca el desarrollo de nuevas tecnologías para la fabricación sostenible, inteligente y de alto rendimiento de componentes de transmisión para la industria del automóvil.

En el transcurso de la jornada se han dado a conocer diferentes sistemas basados en visión artificial, con múltiples aplicaciones para el control de la calidad, mediciones y detección de posibles fallos en la fabricación.

En la sesión, organizada por la Axencia Galega de Innovación – GAIN, se dieron a conocer tecnologías clave para la fábrica de futuro por parte de entidades y plataformas tecnológicas como MANU-KET, ADDIMAT, AFM, FOTÓNICA 21 o el Clúster EUREKA SMART de Fabricación Avanzada.

AIMEN explicó distintos desarrollos que está realizando en robótica colaborativa y flexible, que buscan proveer a la industria de sistemas multiprocesos, adaptables a nuevas necesidades de producción y cuyo manejo sea predictivo para el operador.

Una de las principales innovaciones en las que está trabajando el proyecto ECO-Solar es “Cell-Doctor”, un sistema completamente automatizado capaz de identificar problemas en células solares defectuosas y reparar con láser aquellas que pueden ser recuperadas.

Gracias a esta iniciativa se alcanzará una reducción de entre el 25 y el 30% en la huella de carbono de la cadena de valor completa de la industria fotovoltaica; mejorará la eficiencia de utilización de recursos en un 40%, y se disminuirá en un 50% el impacto ambiental en la recuperación de módulos fotovoltaicos, entre otros avances